Usuario invitado
19 de diciembre de 2023
Muy buen hotel, de sorprendente diseño arquitectónico. Nuestra habitación tenía una espectacular vista al lago Argentino y el ventanal es inclinado, siguiendo las intrincadas geometrías del hotel. La calefacción por losa radiante ese reforzada por un equipo de AA, frío-calor, para encontrar la temperatura que uno desea. El baño es de un diseño moderno y amplio. Calculo que el hotel debe haber sido construído en los '90, y se mantiene muy bien, y en esta época de temporada baja se estaban realizando mejoras al edificio. El tendido de la cama era muy corto, por lo que debíamos estirar las frazadas hacia más arriba, la habitación fue atendida todos los días. El personal muy amable y atento, con más voluntad que experiencia, cumplió con todo lo requerido por nosotros. El restaurante de buena calidad, con un menú algo limitado, pero siempre encontrábamos algo para cenar, ya que almorzábamos afuera durante las excursiones. Aquí también se notaba la falta de experiencia de algunos de los que atendían, y un par de noches con muchos comensales, se demoró bastante la atención. En resumen un gran hotel, donde el solo hecho de estar unos días en esa obra de arquitectura lo hacen maravilloso, el único problema es que está lejos del centro y en las recogidas de los buses para los tours eramos los últimos en ser buscados y devueltos. Daban ganas de tener un auto propio para moverse por el Calafate.