Tivoli Alvor

Nuestra experiencia en este hotel ha sido mala y por supuesto no repetiremos en ningún otro Tivoli. En la reserva especificamos que necesitábamos dos cunas en la habitación y al llegar no estaban. Quisimos llamar a la recepción pero el teléfono no funcionaba así que tuvimos que caminar desde el otro extremo del hotel (un paseo largo y bajo la lluvia) para pedir que las pusieran. Una chica de recepción nos dijo más tarde que el teléfono había sido ya arreglado pero no fue así hasta el día siguiente. A pesar de tener contratado el paquete premium, nos dieron pulseras normales y no lo supimos hasta que nos negaron un cocktail en el bar así que nuevamente tuvimos que ir a la recepción a reclamarlo. Además, como clientes premium teníamos derecho a zumo de naranja natural que no tenían en el bar. En varias ocasiones también nos dijeron que no podían hacernos el cocktail que pedíamos porque faltaban licores. Todas las piscinas tienen un bar al lado o incluso una barra propia excepto la piscina familiar con toboganes, debe ser que si vas de vacaciones con tus hijos pequeños no tienes derecho a tomar un cocktail mientras se bañan. Además, siendo este un hotel muy orientado a familias, nos pareció increíble que el único parque que tienen estuviera “fuera de servicio” por no tener el suelo blando que por seguridad deben tener. En el desayuno del restaurante Roastic, pedimos dos tazas de leche entera caliente para nuestros hijos. Al traerla, vimos que tenía un color extraño (verdoso, amarillento) y el camarero dijo que traería otras dos. Las siguientes tazas fueron exactamente iguales (seguramente leche en polvo) y después de un rato nos dijo que sólo había leche caliente semidesnatada y que la entera tenía que ser fría porque no tenían forma de calentarla. Es la primera vez que escucho que en un restaurante (dentro de un hotel de 5 estrellas, además) no pueden calentar leche. Nuestra habitación tenía suciedad (polvo, migas, pelusas) en el suelo como si no hubieran aspirado. Además, había grandes telarañas en el techo junto a la ventana. Lo más preocupante eran los temas relativos a la seguridad. El hotel tiene un club infantil, el Pluma Club, y el primer día nos acercamos para ver cómo era. Aceptan niños a partir de 4 años, justo la edad de nuestros hijos. Al llegar allí lo que nos encontramos fue un caos horrible de niños de hasta 12 años jugando como salvajes sin ningún tipo de supervisión ya que los dos únicos monitores presentes estaban en la puerta sin ningún acceso visual al resto del espacio. Buena parte del mobiliario y materiales (cojines, material de dibujo, juguetes…) estaban totalmente esparcidos por el suelo; un desorden increíble. El club está dividido en varias habitaciones con recovecos sin vigilar y vimos varios niños muy pequeños jugando solos. Además, en una de las habitaciones había dos enormes estantes (de aproximadamente 1.80 metros) bloqueando dos huecos entre la habitación y el pasillo sin ningún tipo de anclaje ni sujeción por

Tanto las instalaciones como el trato del personal son excelentes. Las habitaciones son de 10 y las piscinas magníficas. Todo el día con una excelente atención por parte del personal que te traía la bebida incluso a pie de la piscina. La limpieza de 10 también.

Para ser un 5* se queda muy cortito, no limpian la habitación, solamente hacen la cama y pasan un poco el baño, en el buffet la comida es normalita y a veces se termina una cosa y no reponen, los camareros parece que están cansados y aburridos, usando el teléfono y haciendo corrillos entre ellos. Los shows repetitivos y muy malos, faltan muchas cosas en los lugares donde está la comida, para ser un "todo incluido". Sólo hay información en portugués y en inglés, incluso las cartas de los dos restaurantes que tienen para cenar y la mayoría de los camareros solo hablan esos idiomas, incluso en la recepción.Las instalaciones bien,

Experiencia agridulce. La habitación bien, pero teniendo en cuenta que es un hotel 5 estrellas hay cosas que no están a la altura El servicio de habitaciones, posiblemente desbordado de trabajo, se presentó a arreglar la habitación a las 16 h o mas tatde más de un dia, habiendo estado toda la mañana libre para atenderla. La comida del restaurante irregular. Platos, algunos ricos pero otros intomables: no se acerquen a los arroces. Insipidos y mal ejecutados. Instalaciones comunes bonitas pero con el personal poco experimentado y con pocas ganas de atender Piscina sucia y turbia, el ultimo dia vimos hasta un salva slip flotando que nadie se dignó a retirar. Hay dos zonas de piscina: una exclusiva de adultos y otra de tres vasos para familias. En la de adultos vimos crios jugando a la pelota y en alguna ocasión los desalojaban, pero otras no, dependiendo del encargado. Es un hotel enfocado a familias británicas, los padres se cuecen a cubatas y mojitos ( all inclusive) y los hijos a helados. No es un hotel para parejas o adultos sin hijos. Tiene todos los requisitos para ser un gran hotel, pero el staff falla. Poca motivación o inexperiencia.

Hemos estado 3 noches y 4 días en este hotel, viajamos con nuestros dos hijos de 11 meses y 4 años. Todo es una sorpresa desde que llegas a la recepción. 1. Nada más entrar por la puerta, te asustas del volumen de gente para hacer el check-in, estuvimos más de 40 minutos esperando cola, sin aire acondicionado y con bastante calor. 2. Teníamos reservado una habitación doble con cama supletoria para nuestra hija desde el mes de mayo, indicando en el momento de la reserva que viajábamos con los dos niños, en ningún momento ocultamos nada. La primera sorpresa fue, que teníamos que pagar 60€ más por noche por la niña, totalmente entendible pero que podrían haber contactado antes con nosotros para comunicarlo. Ojo, con las reservas, contactar con el hotel y tener siempre correo de confirmación. El hotel es Todo Incluido y a parte tiene restaurantes para cenar más tranquilos ( reservamos en este hotel porque nos gusta comer tranquilos y no el bullicio de tanta gente, combinaba perfectamente parque acuático y gastronomía en aparentemente un hotel de lujo) cual fue nuestra sorpresa? Que los restaurantes solo puedes acceder a partir de la cuarta noche, antes es imposible porque no eres VIP, me sorprendió bastante porque después de leer varias veces las condicionesde reseva no aparece este pequeño detalle por ningún sitio, por lo que es una publicidad engañosa. 3. Nos dicen que la habitación aún no está disponible, nos avisarán por el móvil (algo totalmente entendible y más con el volumen de personas que allí hay) Con nosotros viajaban 2 personas más que si tenían la habitación lista, por lo que decidimos dejar el equipaje en la habitación de ellos para así no estar al sol, por la comida del bebe y poder cambiarnos. El hotel es bastante grande ( está dividido en villa, son como unos bloques con 40 habitaciones en cada uno) tiene bastantes cuestas, por lo que tienen unos carros tipo de golf para transportar maletas y personas. Cuando llegamos a nuestro bloque y bajamos todas las maletas del carro, cual es nuestra sorpresa? Que no hay ascensor!!!!!!!! En un hotel de 5*!!!!!! Pura fantasía..... Para nosotros es inviable este aspecto puesto que viajamos con dos carros y otra persona mayor. El chico que nos llevó hasta la villa nos ayudó amablemente, decidimos ir a la.pisicina a darnos un baño mientras estaba lista la habitación nuestra, IMPOSIBLE coger una tumbona, misión imposible. La piscina abarrotada en el interior además todo el mundo con colchonetas y prácticamente no había sitio para pasar. Después de todo esto, nos parecía que estábamos viviendo una broma, por lo que fuimos a hablar con alguien en recepción que pudiera ayudarnos, y aquí empezó nuestra aventura de verdad!. Hablamos con un responsable de recepción si era posible cambiarnos del hotel a Tívoli Carvoeiro, allí no se podía estar, me dijeron que si en el otro hotel no había problema por ellos encantados que lo entendían. Gestione con Tívoli Carvoeiro la disponibilidad y sin problema, m

Llevamos intentando contactar con el hotel durante varios días, muchísimas llamadas y 4 emails para cancelar la reserva ya que las opiniones negativas se suceden y no queremos lamentaciones ya que viajamos con dos personas mayores e imposible comunicarnos, ninguna respuesta a email ni llamadas. Da la sensación que las opiniones negativas son ciertas. Lamentable en un cinco estrellas.

Las instalaciones impecables, las habitaciones limpísimas, la atención del personal magnífica (amables y atentos), el traslado a la playa en trenecito comodísimo y el camino a pie a otra playa muy bien montado -camino seguro y privado- (ambas playas cerca: 10’). El restaurante Carosello riquísimo (muy recomendable la pasta con salsa frutos do mar). Curioso lo tranquilo que es, teniendo en cuenta cuanta gente hay. La única pega: el sofá cama. A destacar: el personal. ☺️

Notas positivas: staff simpático em particular a RP Aline, o Nuno da recepção e o Kaka da animação. Comida variada. Kids Club divertido. A melhorar: Check-in e check-out: na entrada houve um tempo de espera elevado na saída tive uma péssima experiência. Pedi para nos irem buscar ao quarto nos carrinhos para nos levarem ao parque de estacionamento pois o mesmo é longe, tínhamos muitas bagagens e um animal de estimação. Passados 30 minutos de espera ligo para a receção e dizem-me que estão a caminho do quarto. Desço, com todas as bagagens a minha filha e a minha mãe e ficamos à espera e espera, no calor. Liguei para a receção do meu telemóvel mais de 14 vezes sem parar, ou não atendiam ou desligavam a chamada. Acabei por ir à receção presencialmente e só assim consegui que um carrinho nos viesse buscar. Limpeza: trouxemos o nosso gato (o hotel é pet-friendly) a taxa de limpeza é bastante elevada ( 35€/dia) pelo que de uma próxima vez vou considerar outras opções. Acordámos que o quarto seria sempre limpo às 11h00 para que o animal estivesse preso na caixa transportadora durante as limpezas. Em duas ocasiões não respeitaram o horário, sendo que na última vez que aconteceu eram 14h00 e ainda não tinha aparecido ninguém, acabei por desistir da limpeza nesse dia, para não ter o gato preso por muito mais tempo. Toalhas na piscina: é um caos absoluto, sem nenhum controlo. Qualquer pessoa pode levar as tolhas que quiser pelo que havia famílias que levam toalhas a dobrar ou a triplicar. Não há um cesto para deixar as toalhas usadas, pelo que as pessoas as deixam em qualquer sitio, o que dificulta a sua reposição e ficamos sem perceber se determinada esprigaçadeira está livre ou não, porque há toalhas em todas elas! Tendo em conta a total desorganização neste tema, foi frequente ao longo da estadia, não haver toalhas disponíveis. Animação: muito fraca. à exceção do Kaka, que deu vida, energia e boa disposição às aulas de Aquagym o resto é mesmo muito fraquinho. Nota positiva, porém, para os animadores do Kids Club, os miúdos pelo menos pareciam gostar. À noite, a falta de animação, energia e espetáculos tardios ( alguns de pouca qualidade) levavam ao tédio geral. Limpeza das áreas: não há limpeza suficiente, os copos acumulam-se, muitas vezes ficam de um dia para o outro. Situação caricata: num dia à noite a caminho do restaurante, vimos que alguém deixou um prato de sopa em cima de um poste perto de uma piscina. No outro dia ao pequeno-almoço e ao almoço, o prato ainda ali estava! Não houve um único funcionário que visse aquilo e que o tirasse de lá! No entanto, aquele era o caminho principal de acesso ao restaurante! Restaurante/comida: de forma geral acho que o problema deste hotel não é ter falta de staff, é ter falta de gestão e pessoal com pouca formação/qualificação. Nos restaurantes isso é muito visível. Alguns colaboradores andam literalmente a passear (como dois que estavam a arrumar copos - 2 porquê?? - e ainda conseguiram partir alguns! Enquanto